Esta película no es de las que dejan una huella imborrable, porque su historia puede ser corriente, pero cuando queramos imaginar qué es la Enfermedad de Alzheimer podremos remitirnos a ella para saber a qué nos enfrentamos, a pesar de que “El diario de Noa” dejara el listón bien alto.
La película plantea varias reflexiones, como qué hacer cuándo uno es diagnosticado en edad laboral, quién debe cuidar al paciente en su etapa final o qué elecciones debe hacer su pareja, retratando fielmente la enfermedad, desde sus primeras manifestaciones hasta su última etapa, tanto desde la perspectiva de la enferma como la de sus familiares. Julianne Moore recibió un Óscar por su papel protagonista, quizá el mejor de su vida.
En nuestra memoria guardamos varias escenas: cuando sube una y otra vez buscando las pastillas en el cajón y finalmente tiene que hacerlo con el ordenador en la mano, o cuando vuelve a la heladería con su marido y ella le pregunta si ya se tienen que marchar, enseñándonos cómo la ausencia de memoria reduce la experiencia de la compañía a la nada.
Los familiares de enfermos tendrán que enfrentarse a una dolorosa verdad y preparar el pañuelo.
√ Rebeca García Agudo